LA HISTORIA DE SWEET BEAUTY
Dulce Getsemani Ignacio Cervantes
El inicio de un pasatiempo inesperado
En abril de 2020, una joven llamada Alicia de 15 años cursaba el bachillerato, recibió una noticia que cambiaría su vida sin que ella lo supiera, una pandemia obligó a todos a permanecer en casa. Con la suspensión de clases, Alicia se encontró con mucho tiempo libre y pocas opciones de entretenimiento. Fue entonces cuando, junto a su hermana menor, comenzó a experimentar con maquillaje, barnices y mascarillas caseras, sin imaginar que ese pasatiempo se convertiría en su futuro.
Descubriendo una nueva pasión
Su interés por la belleza creció, podía pasar horas viendo tutoriales sobre maquillaje, diseño de uñas y tratamientos de spa, hasta que un día tomó una decisión, quería formarse profesionalmente en este mundo de la belleza. Investigó opciones y encontró un instituto que ofrecía cursos en diversas áreas de belleza, aunque quería tomarlos todos, no tenía los recursos para hacerlo, por lo que decidió asumir los costos por su cuenta. Entre todas las especializaciones, el curso de uñas fue el que más llamó su atención, así que, sin pensarlo dos veces, se inscribió y se comprometió a estudiar y trabajar para convertirse en una experta.
De la formación al emprendimiento
Después de un año de preparación, llegó el día de su certificación como Técnica en Uñas. A pesar de los nervios, supo que todo su esfuerzo habría valido totalmente la pena cuando obtuvo su acreditación. Con el apoyo de su mamá, Alicia acondiciono un pequeño espacio en su casa y comenzó a atender a sus primeras clientas, al principio, sus precios eran bajos, pero al notar que la calidad de su trabajo superaba las expectativas de sus clientas, decidió aumentar sus tarifas y diferenciarse de la competencia, así es como le surgió una idea que innovaría su servicio, ofrecer a sus clientas una bebida o snack de cortesía, así su servicio sería aún más especial.
Perfeccionamiento y crecimiento
Con el tiempo, Alicia continuó perfeccionando sus técnicas, obteniendo más de seis certificaciones y personalizando cada vez más sus trabajos, sin embargo, esto también implicaba tiempos de atención más largos, por lo que se enfrentó a un dilema, mejorar la rapidez o aumentar sus precios. Optó por la segunda opción, priorizando la calidad y la experiencia de sus clientas. Además, implementó nuevas estrategias, como permitirles elegir música o películas mientras recibían su servicio, creando un ambiente aún más acogedor.
El nacimiento de Sweet Beauty
Tras años de esfuerzo y dedicación, Dulce logró abrir el estudio de sus sueños: Sweet Beauty. Con equipos de alta calidad y una experiencia mejorada, su negocio se convirtió en uno de los mejores en su área.
El siguiente gran paso
Pero su historia no terminó ahí, sabiendo que quería llevar su emprendimiento aún más lejos, decidió estudiar Negocios Internacionales, una carrera que le permitiría expandir Sweet Beauty a un nivel aún mayor. Hoy en día, mientras sigue creciendo como empresaria y profesional, Alicia continúa demostrando que con pasión, constancia, disciplina y aprendizaje, los sueños pueden hacerse realidad.